Nuestra vida se transforma completamente al momento de convertirnos en mamás. Desde el embarazo, empezamos a dedicarnos en cuerpo y alma a formar una vida nueva que depende completamente de nosotros para poder desarrollarse, y en ese camino… ¿Te ha pasado que sientes que te abandonas a ti misma como persona?
Es tan demandante el estar constantemente pendientes de las necesidades continuas de ese pequeño ser humano, que cuando empieza a crecer y encontramos un poquito de tiempo para nosotras, nos emociona poder hacer algo que nos haga sentir bien, cortarnos o pintarnos el cabello, hacernos las uñas, tener un masaje, un tratamiento hidratante o un facial. Y empiezan muchas dudas, porque no sabemos si es recomendable hacerlo durante la lactancia.
En esta ocasión vamos a hablar del bótox, una toxina de aplicación intramuscular que previene arrugas y nos encanta, pero genera un poco de miedo y desinformación en relación a la lactancia.
1. ¿Qué es el bótox?
Una toxina de aplicación intramuscular que al administrarse, provoca que el músculo se paralice y con ello, se relaje. Dicho de otra manera, bloquea las señales nerviosas que provocan la contracción muscular. No solo se utiliza para la medicina estética, sino también para tratar enfermedades del esófago, vejiga, los músculos que mueven al ojo, o en otras ocasiones como tratamiento para la sudoración excesiva.
2. ¿Cuáles son los riesgos de ponerme bótox?
En la inmensa mayoría de las ocasiones, ninguno. Lo que sucede con la toxina botulínica es que cuando es administrada de forma correcta y local, no se alcanzan niveles significativos en sangre, porque es una molécula que pesa mucho y se fija rápidamente al músculo donde se administra.
Los riesgos, como en todo, siempre existen, serían sobre todo estéticos relacionados a una mala técnica de aplicación (que te quede la cara dispareja, o que obtengas un resultado poco natural, o que la toxina se disemine a otros músculos que no eran el objetivo).
3. Recuerda que e-lactancia.org es una fuente confiable y accesible donde puedes verificar la seguridad en relación a la lactancia de prácticamente cualquier cosa.
Expliquemos esto paso a paso. ¿Te acuerdas que te decía que la toxina botulínica tiene un peso muy alto que hace poco probable su paso al torrente sanguíneo? Pues este mismo peso, hace que incluso si se encontrara en sangre, no pueda pasar a través de la barrera que divide la sangre de la leche materna. Por si fuera poco, incluso si la toxina llegara a pasar a la leche materna, la leche materna tiene propiedades que neutralizan la toxina. Los artículos dicen:
El paso a la leche materna de la toxina botulínica, se considera “poco probable” (2).
Pero entonces, ¿Por qué e-lactancia clasifica este medicamento como “compatibilidad probable”, y lo pone en semáforo amarillo y no verde?
Porque no existen estudios científicos con suficiente validez como para aprobar oficialmente el uso de bótox durante la lactancia. Mientras los estudios no existan, no se puede aprobar su uso ni asegurar que no es riesgoso, y todo queda como algo “probable”.
Sin embargo, si existen algunos estudios pequeños, cito a continuación la conclusión de uno de ellos:
“Botulin A is not detectable systemically after intramuscular use, thus excretion into breast milk is considered unlikely. The closely related drug, onabotulinumtoxinA was not detectable in the milk of two women and detectable in only minute amounts in 5 others after 40 to 92 units injected into the face. Infants have been safely breastfed during maternal botulism and no botulinum toxin was detectable in the milk of one mother or in her infant. Breastfeeding appears to protect infants against botulism. No special precautions are required. (2)
4. ¿Entonces qué hago? ¿Cómo tomo una decisión?
En esta y cualquier otra circunstancia, siempre pregúntate: ¿Por qué quiero consumir esto? ¿Es necesario para mí en este momento? ¿Existe alguna alternativa?
Es muy importante estar bien informadas acerca de cualquier cosa que apliquemos en nuestro cuerpo, estemos o no lactando. Si eres una madre que quiera aplicarse bótox como tratamiento estético, debes preguntarte si es algo que realmente necesitas y quieres, si te sientes cómoda con la información que tienes, y si no, informarte también acerca de otras alternativas con las que puedas obtener el mismo resultado o similar. Platica siempre con tu dermatólogo, pediatra, ginecólogo y/o consultor de lactancia acerca de la información, opiniones y alternativas, para tomar la mejor decisión.
Mi opinión personal, concluyendo todo lo que acabamos de analizar, tanto si quieres ponerte bótox por estética, o si necesitas el bótox para tratar una enfermedad que padeces, es que la lactancia no debería ser un impedimento para hacerlo.
Andrea Sarmiento IBCLC
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Este fue el día que me puse bótox por primera vez con DermaKer. Yo no iba pensando en eso, en realidad quería unificar mi tono de piel porque con el embarazo me salieron varias manchas, pero Kari me explicó que el bótox era muy importante para cuidar mi piel de ahora en adelante y que ya me había tardado 😂.
Si quieres escuchar el Instagram Live que tuvimos Laila Monteforte IBCLC, DermaKer Karina Escobar y yo, sigue este link para ir a verlo:
Referencias:
APILAM (Asociación para la promoción e investigación científica y cultural de la lactancia materna). (2002). e-lactancia. Recuperado 31 Enero, 2025 a partir de https://e-lactancia.org
Drugs and Lactation Database (LactMed®). Bethesda (MD): National Institute of Child Health and Human Development; 2006. Internet: 2024 Nov 15.